Joyas que brotan del corazón de la tierra.
Terra es una colección que nace donde la tierra se abre, se agrieta y respira. Plata y oro se funden en formas sólidas, orgánicas, esenciales. Son joyas unisex que no siguen modas ni géneros: siguen el pulso mineral del mundo
Cada pieza es una evocación del paisaje telúrico: fisuras profundas, texturas rugosas, superficies que parecen esculpidas por el tiempo y el silencio. Aquí, la imperfección es lenguaje; lo agrietado belleza; la materia, un símbolo de permanencia.
Es un fragmento de mundo llevado al cuerpo.
Una ofrenda a lo que somos antes de nombrarnos: tierra, raíz, piedra viva.
Estos mares no son amables. Son profundos y oscuros.
Una colección unisex que emerge desde las profundidades del océano con la fuerza implacable de un dios Colérico.
Estas piezas sólidas y atemporales evocan la ira de los mares cuando Poseidón despierta furioso, desatando olas de poder ancestral.
Formas abstractas y texturas orgánicas se funden en un diseño místico y salvaje, como talismanes forjados en el abismo.
Poseidón no solo adorna, protege y transforma: conecta con lo inexplorado, con lo que yace oculto bajo la superficie.
En los susurros del bosque, donde la luz se filtra entre ramas antiguas, habitan los Kodama: espíritus ancestrales que custodian los árboles y la memoria de la tierra.
Esta colección captura esa esencia mística y salvaje, evocando la textura viva de la corteza y las formas orgánicas que sólo la naturaleza sabe esculpir.
Piezas sólidas y unisex, forjadas en plata y oro, que nacen de lo profundo del bosque para convertirse en amuletos modernos.
Kodama es un puente entre lo visible y lo invisible, una declaración poderosa que conecta a quien las lleva con la fuerza silenciosa de los árboles milenarios.
Más que joyas, son fragmentos de un bosque encantado.
Nacidas de la marea y el silencio, las piezas de Arrecife parecen esculpidas por el susurro del agua sobre la roca.
Plata sólida, erosionada, texturada como corales antiguos y formas que guarda el océano en su lecho más profundo.
Cada joya es un fragmento del mar, un eco mineral de lo que alguna vez estuvo sumergido, intacto en su imperfección.
Arrecife es un canto sobrio a la belleza orgánica, a lo que resiste, a lo que permanece.
Xcntrik nace de la certeza de que en todo lo bello habita siempre una pequeña rareza. Inspirada en las palabras de Edgar Allan Poe, esta colección celebra lo bizarro, lo imperfecto, lo que destaca sobre lo "normal" y, por eso, fascina.
Piezas grandes y esculturales en plata y oro, con curvas audaces y vacíos que hablan tanto como la materia. Espacios que no buscan llenarse, sino provocar. Formas que no piden permiso, que no quieren pasar desapercibidas.
Xcntrik no es para todos. Es para quienes entienden que la verdadera rebeldía nunca es obediente, ni mucho menos discreta.
Fragmentos de un esplendor perdido, piezas que parecen haber yacido en el lecho marino, marcadas por el tiempo y la marea.
Naufragio es una colección de joyería unisex que celebra la belleza de lo imperfecto, lo dañado, lo que ha sobrevivido al desastre.
Esculpidas en plata y oro, estas piezas sólidas muestran con orgullo sus grietas y roturas como cicatrices hermosas, testigos de un pasado glorioso que se resiste a desaparecer.
Son restos de un naufragio antiguo, joyas que emergen del abismo para recordarnos que, incluso en la pérdida, persiste la luz.
Cada forma orgánica evoca la nostalgia de lo que fue, pero también la promesa de lo que puede volver a ser.
Como un náufrago aferrado a su esperanza, estas piezas susurran historias de resistencia y renacimiento.
Como los charcos de agua salada que reposan entre las rocas, brillando al sol tras la marea, Calipso es una colección que captura la belleza acuática y efímera del mar.
Inspirada en la leyenda de la ninfa Calipso, guardiana de islas lejanas y amores imposibles, estas joyas de plata y oro parecen esculpidas por el agua y la luz. Sus formas ásperas pero luminosas evocan destellos que guardan secretos de despedidas y recuerdos queridos.
Cada pieza es un homenaje a lo que se va, a lo que queda en la memoria como un reflejo sobre el agua. Femeninas, orgánicas y delicadas, son joyas que hablan de nostalgia, de amores que se pierden en el horizonte y de la dulzura de lo irrecuperable.
Calipso es una colección para quien abraza la belleza de lo fugaz y guarda en su piel los destellos de lo eterno.
Acheron es el canto de las almas que cruzan el río.
Piezas talladas por el agua y el viento, cuerpos marcados por el tránsito de la vida. En cada erosión, una historia. En cada vacío, un recuerdo que perdurará.
Estas piezas de plata son fragmentos de eternidad rescatados de las orillas del tiempo.
Como en el viaje por Aqueronte, todo lo que somos se transforma… salvo el alma, que permanece, luminosa, invisible, intacta, infinita.
Acheron es un tributo a la belleza del desgaste, a la nobleza de aceptar el paso a lo desconocido, a la certeza de que en lo esencial, nunca dejamos de ser. Todo cambia, todo permanece.
Dune es un susurro de arena y luz. Una colección de joyas que nace de las dunas, de sus líneas suaves dibujadas por el viento, de su piel porosa que guarda el secreto de paisajes desérticos.
Cada pieza es un fragmento de atardecer, cuando el sol se despide y tiñe de oro y plata el horizonte infinito.
Sólidas, pero ligeras en su gesto, las formas de Dune fluyen como olas quietas, atrapando en su superficie la calma antigua de un lugar que respira despacio.
Un homenaje a la belleza que vive en lo simple, lo orgánico y lo eterno. Un evocación al aire del desierto.
Más allá de las estrellas.
Una colección que imagina mundos lejanos y futuros desconocidos.
Joyas sólidas, con curvas orgánicas que parecen hablar un lenguaje olvidado, como reliquias de civilizaciones que ya no existen… o tal vez, que ya nos visitaron.
Cada pieza es una cápsula de tiempo: futurista, eterna y enigmática, inspirada en inscripciones imposibles y formas que sugieren otros mundos , otros tiempos, otras realidades.
Ad Astra es un viaje. Un diálogo entre lo que fuimos y lo que seremos. Entre la Tierra y lo que hay más allá.
Para quienes sienten que pertenecen a otro lugar. A otra época. A otro cielo.
Lava es la huella de la tierra en su estado más puro.
Plata que fluye como roca fundida, piel endurecida tras el incendio. Superficies ásperas, relieves orgánicos.
Cada pieza conserva la memoria del fuego, del peso, de la temperatura.
Es materia transformada, vestigio de un momento violento y hermoso.
Texturas rugosas, bordes irregulares… como si la pieza hubiera nacido del corazón del volcán y aún guardara su aliento caliente.
Lava es fuerza mineral, forma accidentada, cuerpo que revela su origen. Un recordatorio de que todo lo esencial, antes de ser, fue magma.
Pebble - Xilex es una colección unisex que dialoga entre dos naturalezas: lo pulido y lo ancestral.
Pebble toma la forma de las piedras de río, suaves, gastadas por el tiempo y el agua, con alguna grieta que recuerda su origen. Son fragmentos de calma, de permanencia.
Xilex mira hacia lo esencial, evocando las primeras piezas talladas por manos antiguas. Formas básicas, cortantes y primitivas, que conservan la memoria de lo que fuimos.
Ambas series se encuentran en una misma esencia: materia simple, formas elementales, símbolo de conexión con lo natural y con algo más antiguo que las palabras.
Joyas mínimas, sobrias, con un eco místico.
Cocoon es una colección que habla de los procesos invisibles, de los ciclos que transforman desde adentro.
Colgantes de plata y bronce que parecen cápsulas, carcasas marinas o refugios minerales, donde algo nuevo aguarda su momento.
Huecos pero sólidos, como el espacio donde ocurre la metamorfosis, estas piezas evocan protección, renacer y posibilidad.
Cocoon es símbolo de tránsito: lo que fuimos, lo que dejamos atrás, lo que estamos por descubrir.
Un amuleto para quienes saben que todo cambio verdadero empieza en silencio.
Hay un lugar donde el viento canta con furia y las olas se alzan como criaturas vivas. Famara es un homenaje a esa playa indómita, a sus corrientes traicioneras, sus riscos afilados y su arena infinita que parece extenderse hasta perderse en los sueños.
Esta colección captura la belleza áspera y luminosa de ese paisaje. Joyas sólidas, unisex, como fragmentos arrancados del acantilado o restos moldeados por la marea.
Cada pieza guarda en su forma el eco del viento, el rugido del agua y el tacto áspero de la roca.
Famara es un canto a lo salvaje, a lo hermoso y peligroso. Un recordatorio de que la naturaleza no se domestica, solo se honra.
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